El cambio climático es cada vez más evidente en nuestro planeta, día a día fenómenos y anomalías climáticas son más frecuentes e incluso la certeza que se tenía en el comportamiento del clima durante las diferentes estaciones del año ha desaparecido, hoy en día es común años con inviernos más cortos de lo normal, veranos mucho más calientes e incluso la desaparición de algunas estaciones durante el año.
Si bien la transformación climática es ahora más apreciable, son las grandes catástrofes climáticas las que más llaman la atención y alarman al público en general sobre cómo el planeta está respondiendo a las acciones del ser humano que alteran el equilibrio climático, huracanes más potentes, tornados con mayor frecuencia y potencia, sequías prolongadas y demás eventos climáticos anormales que causan destrozos y pérdidas materiales y humanas en todo el mundo.
El 2015 fue un año umbral en este sentido, ya que la tierra tuvo la desgracia de presenciar la primer súper tormenta en la historia documentada por el ser humano, el huracán Patricia.
Cayendo dentro de la categoría de ciclón tropical, el huracán Patricia fue el resultado de la perturbación tropical generada al sur del golfo de Tehuantepec durante los meses de octubre y septiembre del 2015. El huracán Patricia reunió una serie de características que le otorgaron el título de el más peligroso y potente de la historia y, es con esto, que la humanidad abre el registro de tormentas que superan la categoría 5.
El huracán Patricia presentó un lento proceso evolutivo, pasando desde finales del mes de septiembre donde se le categorizó como una depresión tropical, tras días de lento fortalecimiento, Patricia tuvo un crecimiento repentino y acelerado entre los días 21 y 22 de Octubre causando alarma y preocupación en el estado mexicano, el cual se encontró en proximidad y curso del fenómeno climático, siendo los estados de Jalisco, Colima y Nayarit los de mayor alerta debido a su proximidad con el frente de tormenta y su densidad poblacional.
El fenómeno tomó por sorpresa a los distintos institutos meteorológicos de la región y captó la atención de la NASA, ya que contrario al historial climático de la región, este fortalecimiento acelerado de tormenta es muy poco común en el hemisferio Oeste del planeta y solo se había observado en los conocidos tifones generados mar adentro en el Océano Pacífico y estos suelen perder su potencia si alcanzan la costa.
El huracán Patricia fue rápidamente superando varios récords en términos de fenómenos climáticos, ubicándose al momento de su formación en la categoría de los huracanes Odile y Kenna, para alcanzar el día 23 de Octubre a altas horas de la madrugada la categoría 5 de la escala de huracanes y tormentas tropicales, superando al que se tenía para el momento como el huracán más intenso generado en el Océano Pacífico, el huracán Linda.
En cuanto a características el huracán Patricia presentó vientos de 345 km/h o 215 m/h, aunque por breves periodos los vientos presentaron breves ráfagas que llegaron a alcanzar los 400k/h o 250 m/h por poco más de un minuto. Otro récord que rompe el huracán Patricia es la menor presión registrada en el hemisferio occidental, 873 hP. Finalmente en cuanto nivel de precipitaciones, este huracán alcanzó las 12.50 pulgadas, en la región del Nevado de Colima, México.
En materia de pérdidas el huracán patricia fue moderado, ya que gracias a la prevención y monitoreo del fenómeno todas las advertencias y precauciones fueron tomadas y se mantuvo las bajas al mínimo, aun así 13 personas fallecieron por causa directa del huracán y 6 más por causas indirectas del mismo. Económicamente hablando Patricia causó daños por aproximadamente 410 millones de dolares americanos, la mayor parte entre las regiones de Nayarit, Michoacán y Jalisco. Aunque se tiene registro de otras regiones afectadas en otros países de la región como Texas y algunas regiones de Guatemala.
Patricia es una evidencia más que el cambio climático está afectando fuertemente a nuestro planeta, según el National Hurricane Center ubicado en Florida, los fenómenos atmosféricos registrados en torno al huracán Patricia guardan una cercana relación con la temperatura de los océanos, los cuales han ido en ascenso acelerado en los últimos 50 años. Aunque aún se estudia los posibles orígenes del comportamiento de este fenómeno climático, se acepta que es este aumento de la temperatura del agua es el principal factor que contribuyó a la formación del huracán Patricia.
El origen de súper tormentas es otra de las consecuencias visibles de la variación climática que el ser humano está causando con sus actividades. Esta vez la región de México salió relativamente bien librada, las bajas fueron mínimas y los daños no fueron tan elevados como podrían haber sido si el huracán no hubiese perdido su potencia rápidamente al acercarse a tierra.
Expertos aseguran que estos eventos se harán cada vez más comunes conforme la temperatura atmosférica y del agua oceánica sigan aumentando. Esto a su vez acentuado por la actividad humana, por lo que resulta sumamente importante controlar, replantear y reemplazar aquellas actividades que por sus emisiones tienen efectos negativos en la conformación atmosférica y amplifican el calentamiento global.
Imágenes y datos cortesía del National Hurricane Center, Florida USA.
